En el trayecto medio del sendero, se registran 10 bloques dispersos en la pampa, algunos cerca de pequeños recintos circulares. No se trata de apachetas o marcas, pero se encuentran en contextos arqueológicos adicionales, como el sendero tipo "rastrillo" y fragmentos de cerámica doméstica. Este sector está relacionado con el tráfico de animales domésticos, la presencia de cazadores-recolectores y pastores de ganado menor en diferentes períodos históricos.

El bloque 1 marca el extremo noreste del sendero, mientras que el bloque 10 marca el extremo suroeste. Los restantes 9 bloques, con evidencias de grabados, se distribuyen espaciadamente entre estos puntos. Estos bloques cubren una superficie aproximada de 120.000 metros cuadrados.

En el sector 2, los esquemas dominantes son horadaciones naturales y "tacitas" artificiales. Algunos bloques presentan grabados en bajo relieve, pero no representan figuras específicas. Más bien, creemos que se trata de surcos simbólicos de posibles acequias y "cochas" que adquieren significado cuando ocasionalmente caen pequeñas lluvias durante los meses de verano. Estos grabados pueden tener connotaciones mágicas, especialmente en un ambiente de desierto absoluto.

Entre los diseños más representativos se encuentra el grabado de un diseño solar en el bloque 7. Se caracteriza por círculos rodeados por "rayos", como suele representarse el sol. Este diseño solar es un ejemplo claro de los grabados encontrados en el sector 2.